La calibración es un procedimiento que se aplica a instrumentos de medición (sean estos mecánicos o electrónicos), en el que se realizan operaciones para comparar el resultado entregado por el instrumento (la medida), con patrones de referencia de valor conocido.
Por ejemplo, para calibrar una balanza, se requiere tener patrones de masa, de valor conocido y que puedan ser pesados mediante el equipo que deseamos calibrar. Luego se procede a pesar cada uno de los patrones con los que contemos y que puedan ser determinados por el equipo, para luego realizar la comparación entre el valor medido y el valor “real” de la masa patrón.
Cabe mencionar que muchas veces se confunde al procedimiento de calibración con el procedimiento de ajuste del equipo. En el proceso de calibración, no se modifica el comportamiento del equipo que está siendo calibrado, solamente se realiza la comparación entre la medida y el patrón usado.
En algunos equipos de medición (por ejemplo los pH metros), se tiene la función de calibración, la misma que normalmente realiza también el ajuste del equipo para que indique el valor correcto. En estos casos, el equipo realiza la calibración antes que el ajuste, pues con la calibración obtiene las magnitudes necesarias para realizar el ajuste y con estas ajusta la respuesta, finalmente vuelve a realizar una nueva calibración para confirmar que el ajuste haya sido correcto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario